Técnica Creativa de la Anticipación

¿Hacia dónde se dirige esa idea?

Cuando escuchamos a alguien describiendo una idea, tendemos a anticipar lo que va a ocurrir.

En el proceso solemos descubrir ideas y soluciones distintas de aquellas que se esperaban en un principio.

Curiosamente, cuando alguien nos está contando una historia o nos presenta una idea, tendemos a anticipar su desenlace. Es parte de la naturaleza humana, y deriva de nuestro impulso de resolver acertijos y dar sentido a toda información que quede incompleta, aunque aún esté en proceso de ser comunicada. Intentamos adelantarnos para ver a dónde conduce la historia o la idea que se nos describe. Esto nos permite predecir resultados o soluciones completamente diferentes de la que finalmente revela el autor original de dicha historia o idea.

Anticiparse a una idea

La información incompleta o ambigua puede ser un poderoso estímulo para generar ideas alternativas. Pese a que normalmente se considera que la claridad y la completitud son atributos positivos para la mayoría de los aspectos de la comunicación, limitan mucho nuestras opciones y tienden a disuadirnos de seguir buscando caminos o soluciones alternativas. Una historia incompleta o una idea revelada solo a medias dan a otra persona la oportunidad de tomar ese hilo argumental o concepto y redirigirlo, de manera que se originen soluciones nuevas.
Si trabajas en equipo, tu compañero y tú podéis aprovechar al máximo el potencial creativo de la predicción empleando la técnica de la anticipación para llevar vuestras ideas en distintas direcciones creativas. Primero tendréis que pasar un rato pensando en solitario, haciendo una lluvia de ideas individual con algunos conceptos iniciales en respuesta al briefing en el que estáis trabajando. A continuación, presentaos mutuamente vuestras ideas de manera que reveléis solo parcialmente las direcciones que cada uno de vosotros está explorando, o bien simplemente insinuad de forma indirecta o abstracta vuestras respectivas soluciones. Después, mirad a ver hasta dónde podéis llevar o desarrollar las ideas del otro, provocadas por los conceptos de partida. Hay bastantes probabilidades de que cada uno tenga ideas o soluciones muy distintas, ¡y puede que sean aún mejores!
Otra posibilidad es que presentes parcialmente tus ideas a un equipo más amplio para ver hasta dónde llegan. Cuanta más gente se vea implicada en este proceso, más ideas alternativas surgirán.